Del coworking al coliving, nuevos estilos de vida
Si pensabas que los coworkings eran lo más novedoso en cuanto a economía colaborativa, estas muy equivocado. El coliving se está popularizando entre las ciudades más cool del planeta, y aunque en España todavía no es muy conocido, no pasará mucho tiempo en empezar a oír esta palabra entre los jóvenes profesionales.
Primero debemos saber que es el Coliving y de donde proviene esta tendencia.
El concepto del coliving empieza a coger fuerza en la zona de San francisco, en el año 2013, coincidiendo con la fiebre de los emprendedores de Silicon Valley. Su finalidad es no tener que perder tiempo en desplazarte al lugar de trabajo. Se trata de un estilo de vida que liga la vida laboral con el trabajo desde casa, para fomentar las relaciones personales con la posibilidad de colaborar en proyectos comunes entre los compañeros de piso.
El objetivo es buscar un compañero de piso con el cual compartir inquietudes, pero sobre todo poder compartir ideas y proyectos en los que ambos tengan el mismo objetivo. Seria algo así como hacer un proceso de selección para encontrar tu compañero de piso/compañero de trabajo, y conseguir hacer “networking” en tu propia casa.
Los espacios coliving son muy populares entre los “nómadas digitales”, personas que se dedican a viajar pero sin dejar de lado sus obligaciones laborales. Para ellos solo necesitan un hogar con una buena conexión WiFi. Normalmente las estancias no suelen superar los seis meses, tiempo suficiente para compartir experiencias, y absorber ideas de tus compañeros haya donde vayas.
Aunque en España no es muy popular, existe un pequeño rincón en plena naturaleza, un lugar idílico donde poder estar trabajando rodeado de árboles y respirando aire limpio, apartado del bullicio de las grandes ciudades. El proyecto se llama sende y se trata de un coworking rural creado por María y Edu, donde los coworkers acuden para trabajar pero sobretodo mejorar la calidad de vida.